El sitio Mesón Cuevas del Vino es restaurante y sitio de comida en Chinchón (Madrid).
Mapa de Mesón Cuevas del Vino ❤️ Chinchón
Pte.es Mapa de Mesón Cuevas del Vino ❤️ Chinchón.
Información local sobre Mesón Cuevas del Vino ❤️ Chinchón
El lugar Mesón Cuevas del Vino es restaurante y sitio de comida.
ℹ️ Descripción: Cocina española casera, como cochinillo y rabo de toro, y vino de la casa en una casa de labranza del siglo XVIII.
📍 Dirección: C. de Benito Hortelano, 13, 28370 Chinchón, Madrid, España
🏠 Localidad: Chinchón
🗺️ Provincia: Madrid
🌐 Sitio Web: https://www.cuevasdelvino.com/
☎️ Teléfono: 918940206
📅 Horarios:
- lunes: 12:00–16:30
- martes: Cerrado
- miércoles: 12:00–16:30
- jueves: 12:00–16:30
- viernes: 12:00–16:30, 20:00–23:00
- sábado: 12:00–17:00, 20:00–24:00
- domingo: 12:00–17:00
🌍 Coordenadas: lat/lon: 40.1405556, -3.4172222
Información Turística de Mesón Cuevas del Vino 4.2⭐ - votos: 1722 👍
Mesón Cuevas del Vino 4.2⭐ - votos: 1722 👍
Opiniones de Usuarios sobre Mesón Cuevas del Vino
Todo un símbolo y monumento histórico de Chinchón. Solo entrar al local y te transporta en el tiempo, y esto es el valor agregado que tiene el comer en este mesón. Visitamos este mesón de interés turístico, por 3 euros te hacen una visita guiada por todo el mesón, una muy buena explicación de las funciones anteriores del conjunto con el aceite y vino, visitando las cuevas con las tinajas gigantes.
Buena comida y buena atención. Una pega importante. Reservamos con un mes de antelación para comer 8 personas. Cuando llegamos nos dicen que se han quedado sin cordero, el plato estrella. En general todo bien, quizás para la cantidad de los platos lo veo algo caro.
Probé el postre de almendra con merengue, pero la base, no me gustó. Para beber pedimos medio pellejo de vino, muy curioso, como lo sirven. Ya solo queda venir a comer, que promete. ¡Merece la pena! Solo hay cordero para cuatro, muy bueno, en su punto, asado con especias y acompañado de patatas panaderas.
El resto del grupo elige solomillo, muy tierno y chuletas de lechal muy ricas. Nos ofrecen otros platos pero la verdad, salimos algo disgustados. Al finalizar en la tasca te podías tomar un chato de vino y un pincho. Es la primera vez que íbamos , llegamos pronto y nos dijeron que podíamos visitar por nuestra cuenta las cuevas, así que estuvimos viendo todo, los aperos de labranza, las tinajas firmadas, las cuevas, etc.
Es un lugar muy curioso, único. La atención es excelente. La comida me pareció buena sin ser espectacular, pero creo que esta visita es obligatoria si estás visitando este pueblo. Comimos a la carta, no el menú degustación y los platos no son muy abundantes y no tienen guarnición, vienen con una cazuelita de salsa, pero las patatas, hay que pedirlas aparte.
El lugar es singular, merece la pena conocerlo. El postre del menú es algo escaso y la leche frita es mejorable, el pastel de almendra y la flor muy ricas. Respecto a la atención, fué una camarera muy agradable quien nos atendió, llegamos los primeros y para el resto del personal, debimos pasar desapercibidos, a pesar de estar en el medio de la sala, porque según fué viniendo gente, se dirigían a ellos y preguntaban si conocian el sitio, si estaba todo bien, etc a nosotros nada🤷♀️.
Estaba bien cocinado, aunque pedimos unas gambas rojas al ajillo, y vinieron frías, normalmente en todos los sitios las sirven hirviendo🙄 una ensalada de perdiz escabechada que estaba muy rica😋 yo chuletillas de lechazo y mi marido secreto que estaba demasiado fino, pero de sabor bien.
Elegimos el menú degustación, cuenta con pequeños entrantes (5) de la cocina típica de la zona: chorizo, migas, morteruelo, judias y pimientos asados.